lunes, 27 de junio de 2011

barra à terre is back.

Mucho tiempo sin escribir. Y ahora que tengo que ponerme a hacer un ensayo de unas 15 ó 20 páginas, me acuerdo de mi olvidado blog. ¿No les pasó nunca?. Sí, todo se vuelve más interesante cuando hay que sentarse a hacer las cosas que tenemos pendientes. La mancha en la alfombra de hace dos meses se interpone en tu camino y decís: "Uy, tengo que limpiar esto. Cuando termine agarro los libros" Y así podes estar husmeando tu casa hasta que son las 8 de la noche y tus apuntes siguen esperandote en el escritorio con un par de telarañas.

Yo, por mi parte, tuve un buen cuatrimestre. Hasta junio. El 2/6 cayó un señorito inglés que alojamos en mi casa, por ser hermano de un amigo de mi hermano (¿se entiende?). Todos contentos mostrándole la ciudad y armando recorridos, hasta que caímos en la cuenta de que S (guardemos discreción, por favor) se quedó en mi casa casi 3 semanas. A todo esto, mis apuntes quedaron colgados y guardados varios días seguidos, hasta que me di cuenta que tenía (casi) la soga al cuello y tenía que entregar muchos trabajos y rendir exámenes. Me fue bien, por suerte, pero espero que esto de colar lo propio por lo ajeno no se repita.

Black Swan.


Cuando vi la película, dije: "naaaah... no está TAN buena como dicen". Pero luego rescaté muchas cosas que me interesaron: La relación de Nina con su madre, la obsesión de la protagonista por ser perfecta, por agradar, por ser la niña buena, por ser el "white swan", y su personalidad totalmente escindida de su sexualidad a pesar de ya ser una mujer adulta de 28 años. La compañía de Ballet en la que estudia su carrera, abre la nueva temporada con "El lago de los Cisnes", una obra clásica del ballet. La historia básicamente trata de una chica dulce, pura y vírgen que es convertida en cisne (White Swan) y que necesita del verdadero amor para romper el hechizo. Su deseo se hace realidad y adquiere la forma de un príncipe, pero éste será engañado y seducido por la gemela malvada de la muchacha, el Black Swan (Cisne Ngero). La tarea desafiante para la protagonista es encarnar a ambos cisnes en el mismo acto. Obviamente, a medida que crece su obsesión por mostrarse perfecta en el rol para el que fue elegida como Reina de los Cisnes, crece tu ezquisofrenia, y su metamorfosis para encarnar al Cisne Negro sólo le será posible a medida que su enfermedad pogrese.
Hace un par de años, tomé clases de algo que se llama barra à terre, y es una disciplina que trata sobre el precalentamiento del ballet. Es muy parecido al stretching, justamente, pero es mejor. Además, alguna que otra técnica de Ballet se aprende, y es muy lindo.

La cuestión, me sorprendí a mi misma cuando dije que quería volver a intentarlo, asi que sin titubear fui y me compré unas badanas.
Puede que sea influencia de la película, lo más probable, pero ¿quién dijo que no se pueden intentar las cosas por segunda vez?.
Asi que, a calzarse las badanas y a bailar, a soltarse...y a ser!