miércoles, 7 de abril de 2010

Un día en la vida de...


Aclaración importante: Ya quisiera haberme entrevistado con él, pero algún día lo haré! Y ahi sí será publicado como una autentica entrevista.




Segundo, esto que van a leer ahora, es una asignatura de una materia que estoy cursando en la facultad. La consigna era escribir "un día en el diario íntimo de un famoso". Muchas celebridades se me ocurrieron (Ellen Pompeo, Katherine Heigl, Melissa George), pero el 99,9% de mi clase era probable que no los conocieran... así que opté por un gran profesional. Consigna importante: no se podía decir explicitamente en el texto sobre quién trataba... asi que, si ustedes aciertan, habré hecho bien mi trabajo.




6 de septiembre de 2007

Querido Diario:


Como ya habrás podido anticipar, hoy fue mi cumpleaños. Cumplí nada más ni nada menos que 43 años. No sé porqué, pero debo admitir que la cifra me asusta un poco: la década de los treinta va pareciendo cada vez más lejana.
En casa es tradición agasajar con un brindis de medianoche al cumpleañero. Así que, descorchado el champagne, tuve el privilegio de oír decir a mis hijos y mi mujer, mediante una carta, cuánto me amaban y me acompañarían en este nuevo año que comenzaba para mí.
Después de una pequeña sobremesa, acosté a mis dos hijos junto a sus peluches preferidos y me dirigí a mi habitación. Con una sonrisa dibujada en mi rostro, me acosté junto a mi mujer, y le di las gracias por acompañarme siempre en todo.
Ya arrancado el día, toda mi parentela –hermanos, sobrinos y primos- no dudaron en venir a visitarme y quedarse para compartir un ameno almuerzo. ¡Hasta mi hermano mandó a poner un pasacalle! Decía “¡Sergio querido, el pueblo está contigo! Feliz cuadragésimo tercer cumpleaños”. Me deschavó delante de medio Banfield, pero fue un ocurrente gesto de su parte.
Alrededor de las seis de la tarde, me presenté al programa como de costumbre. La rutina quedó atrás cuando no encontré a nadie en el estudio, excepto a los de maestranza y la gente de cámaras. Cuando pregunto en recepción porqué el noventa por ciento de mis compañeros no se presentó a trabajar, me explicaron que había fallecido el pariente de un colega, y que todos habían ido al velorio. Aunque alarmado por la noticia, traté de disimular mi desconfianza con la respuesta obtenida. Sin más remedio, enfilé al estudio para comenzar el programa. Apenas prendo las luces, todas las caras conocidas estaban en la habitación…y seguido del unísono “¡Feliz cumpleaños!” las risas inundaron el estudio. Mi cara y ánimo cambiaron súbitamente: todos mis colegas se acercaron a saludarme en mi día. Había una gran torta decorada que fue preparada por las chicas de producción, y también muchos presentes.
A pesar de todos los que estaban, hubo una gran ausencia: mí querido amigo y colega Mario Mazzone no estuvo presente en el día de hoy. En el brindis fue recordado tanto por mi como por la producción del programa, reavivándolo en nuestra memoria como un gran amigo y un respetado profesional.
Una vez arrancado el programa, tuve el privilegio de cubrir gran parte de las noticias (pequeño gran presente que se le hace a los cumpleañeros).Y una vez terminado, me dirigí a casa a cenar con mi familia. Mi mujer junto con mi hija me prepararon mi plato preferido: ñoquis con salsa de champignones (sí, podría haber sido sushi o salmón ahumado, pero soy un tipo sencillo).
Resumiendo, hoy estuvo espectacular. Ahora voy a acostarme y recordarle a mi mujer cuánto la quiero y lo importante que es para mí. Mañana… será otro día.



Sergio L.

___________________________________________________


Gracias por leer!

Será entonces, hasta la próxima producción.

1 comentario:

  1. Es Lapegue! (no sé cómo hacer diéresis, je!)
    Muy lindo Mari!
    Un beso,
    Mariana S.
    (me gusta esto del apellido incognito)

    ResponderEliminar