La jornada del martes comenzó algo turbia. La diferencia entre los bonos de rendimiento a diez años[*] italianos y los alemanes disparó un nuevo récord: 495 puntos que pondrían a Italia al borde del default[1] (lo que significa que Italia no tiene lo suficiente para pagar las deudas contraídas). Esto coloca al país en una encrucijada: o elige salvar a los acreedores, que son los bancos, o elige salvar a la población. En el caso de la primera, se recurre a las medidas de austeridad como el recorte a beneficios sociales. Si se opta por la segunda, el gobierno sigue brindando servicios pero corre el riesgo de que la deuda siga incrementándose. En Europa, los planes de ajuste se volvieron la herramienta más apelada por los gobiernos, como es el caso de Grecia.
El Parlamento
Berlusconi decidió salir de escena un día agitado. Durante una sesión parlamentaria en donde se debía aprobar el Balance de Estado 2010 (las pérdidas y las ganancias), su gobierno perdió la mayoría absoluta. Los partidos opositores estuvieron presentes pero no emitieron su voto, a fin de "no obstaculizar la aprobación del balance"[2] que tuvo 308 votos a favor. Sin embargo, los presentes y no votantes fueron 320, cuatro más que la mayoría absoluta de la Cámara, que es 316, y ocho votos más que los obtenidos en el balance(308). Los números constataron que Berlusconi no tiene la mayoría absoluta necesaria para poder seguir gobernando.
"Me siento traicionado"
Así dijo el Cavaliere cuando, desconcertado, vió el resultado de la votación. Pidió una hoja con nombres y apellidos para ver quiénes no lo habían hecho, que fueron ocho. Luego de anotarlos en su libreta bajo el rótulo de "ocho traidores", se reunió con sus colaboradores. Más tarde se dirigió a la residencia presidencial y acordó con Giorgio Napolitano, jefe de Estado italiano, que renunciaría a su cargo como primer ministro bajo la condición de que antes debían ser aprobadas las medidas anti-crisis exijidas por la UE. Será el turno de Napolitano de decidir si convocar a elecciones(adelantadas) o tomar él mismo las riendas de un barco, que cada vez parece hundirse más, y encarar un nuevo gobierno.
Monopolio mediático
Si hay algo por lo que también es conocido Silvio Berlusconi, es por ser propietario de muchos medios de comunicación en Italia. El semiólogo italiano Umberto Eco señala que la táctica de recurrir al Ejército y a la Policía para adueñarse de un país ya no es viable, porque es más eficaz apropiarse de los medios. "Hoy, un país pertenece a quien controla los medios de comunicación"[3], explica Eco.
El 10 de mayo de 1994 Silvio Berlusconi fue nombrado primer ministro. Durante un efímero gobierno de un año, renunció por complicaciones judiciales. En 1996 se presentó nuevamente como candidato, pero fue derrotado. No fue hasta 2001 cuando tomó revancha y obtuvo una victoria avasallante por sobre los partidos opositores. Amigo de políticos y miembros del sector bancario, Berlusconi construyó alianzas que le facilitaron el camino. Obtuvo permisos para canales nacionales y, poco después de su adquisición, compró canales en Francia, España y Alemania. Además de haber adquirido también editoriales como Mondadori, el diario Il Giornale y revistas como Panorama[4].
"Prefiero ser mujeriego antes que homosexual"
Esa fue la respuesta que le valió el apoyo de la comunidad gay al salir a la luz sus affairs. Las reiteradas infidelidades y las fiestas de alto contenido sexual que brindaba en sus propiedades le hicieron terminar su matrimonio con la actriz Verónica Lario. Además, está siendo investigado por un tribunal que lo acusa de abuso sexual y violación a Karima El Mahroug, alias Ruby, una marroquí menor de edad[5].
En economía se conocen cuatro etapas: el punto más alto es el auge. Cuando las complicaciones comienzan a avizorarse, se da lugar a la recesión que es cuando se comienza a descender. La depresión es conocida como el punto más bajo del ciclo (estancamiento, períodos de desempleo y poca demanda de los consumidores son algunas características de este período). La renovación del capital producirá efectos de recuperación que irán ascendiendo hasta llegar nuevamente a un auge. Yo me pregunto si se podrá decir lo mismo del poder, si se recicla en sí mismo o si, una vez acumulado en una sola persona, tiende al desgaste y al declive. Pero eso quedará para otro post...
Fuentes y referencias
[*]Los bonos son un "pagaré" que el gobierno emite y coloca en el mercado a un determinado valor. Dependiendo de la solvencia del país, ese valor sube o baja. Los acreedores que lo compren pueden venderlo o retenerlo por determinada cantidad de tiempo a la espera de que ese valor (por el que fue adquirido) se incremente. Cuando se decida "canjearlo" se obtendrá el nuevo valor sumado a los intereses.
[1]Disponible en línea en http://www.lanacion.com.ar/1421598-la-crisis-lo-vencio-se-va-berlusconi [2]Disponible en línea en http://www.pagina12.com.ar/diario/elmundo/4-180874-2011-11-09.html [3]Eco, Umberto(1987)"Una guerrilla semiológica" apartado de La estrategia de la ilusión, Lumen, Buenos Aires. [4]Dispoible en línea en http://www.pagina12.com.ar/diario/elmundo/subnotas/180874-56509-2011-11-09.html [5]O'Donnel, María(2011)"El anotador", publicación mensual de la revista OHLALÁ! en marzo.
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